Ir al contenido principal

Lecturas del 2015, por Camila Bordamalo García


Cuando intento recordar todo lo que leí en el 2015 es poco lo que me viene a la mente, abandoné muchos de los libros que empecé y no empecé tantos. Sin embargo hay unos cuántos que salvaron mi año, los enumero a continuación.

1.  La mujer justa de Sándor Márai


Este libro llegó a mi vida como la respuesta a una serie de preguntas existenciales. Ya había leído antes otros libros del autor húngaro, suelo recomendar El último encuentro. Sándor Márai es de una sensibilidad exquisita y como dice en la contraportada de La mujer justa, en esta novela están sus páginas más íntimas y desgarradas, las más sabias. Como los demás libros de Márai la mujer justa describe la decadencia de la burguesía, el cataclismo de una cultura, y narra la historia de tres personas, una mujer que ama a su marido, pero no es correspondida, un burgués que se enamora de una criada, y una criada que se casa con el señorito de la casa. Disfruté su lectura y al final descubrí que ninguno era digno del amor del otro y que todos tenían razón al concluir, al final de sus vidas, que la persona justa, el alma gemela, no existe.


Cito a continuación un fragmento. Recomiendo este libro, le doy 6 estrellas de 5.

 “Ya lo sé, estás pensando en la soledad. En esa soledad intensa, profunda que rodea a cualquier humano ser humano de espíritu creativo igual que el aire envuelve la Tierra. Pues sí, quien debe cumplir una misión siempre está solo. Pero no estoy seguro de que esa soledad sea motivo de sufrimiento. Yo siempre he sufrido más por el contacto con otras personas, por la vida social que por la verdadera soledad. Hasta cierto momento en nuestra vida, la soledad nos parece un castigo, nos sentimos como el niño al que dejan solo en un cuarto oscuro mientras los adultos conversan y se divierten en la habitación de al lado. Pero un día nosotros también nos hacemos adultos y descubrimos que, en la vida, la soledad, la verdadera, la elegida conscientemente, no es un castigo, ni siquiera es una forma enfermiza y resentida de aislamiento, sino el único estado digno del ser humano. Y entonces ya no es tan difícil soportarla. Es como vivir en un gran espacio donde siempre respiras aire limpio.

Pues así era mi padre y nuestro mundo, el mundo del dinero, del trabajo, el orden, el universo del burgués. Como si la casa y la fábrica estuvieran dispuestas para la vida eterna. Como si las ceremonias del trabajo y de la vida estuviesen programadas más allá de la vida misma. En casa siempre había un gran silencio. Yo también me acostumbré pronto a imitar ese silencio: quien habla tiene mucho que esconder; en cambio, quien calla con coherencia está convencido de algo. Eso también lo aprendí de mi padre. Pero, de niño, sus lecciones me hacían sufrir. Me parecía que faltaba algo en nuestras vidas. El amor, dices…El amor sacrificado…Es tan fácil decirlo. La experiencia me enseñó después que el amor mal interpretado o erróneamente exigido causa más víctimas que la lejía, el automóvil y el cáncer de pulmón juntos. La personas se matan con el amor como a través de una emanación invisible y letal. Exigen cada vez más amor, quieren para ellos toda la ternura del mundo. Desean sentimientos completos, totales, pretenden extraer de su entorno toda la fuerza vital con la avidez de ciertas plantas gigantescas que absorben sin piedad de los acuíferos y los mantillos de su alrededor toda la humedad, la fuerza, el aroma y la luz. El amor es un egoísmo sin control. No sé si haya muchos seres que sean capaces de soportar la tiranía del amor sin sufrir heridas mortales. Mira a tu alrededor, mira por las ventanas de las casas, mira los ojos de la gente, escucha sus lamentos: en todas partes encontrarás la misma tensión desesperada. No pueden soportar la exigencia de amor que hay en el aire. Por un tiempo lo aguantan, llegan a acuerdos; pero luego se cansan. Y entonces llegan los ardores de estómago. La úlcera. La diabetes. Los problemas cardíacos. La muerte.”

2. La carretera


Empecé La carretera de McCarthy con escepticismo,  me costaba creer que pudiera existir un libro sobre el apocalipsis igual o mejor a El país de las últimas cosas de Paul Auster, que tiene un lugar destacado en mi altar personal, pero debo aceptar que La carretera es un libro muy bueno. Me gustaron sus atmósferas, sus paisajes desolados y por supuesto la historia. Contrario a lo que muchos piensan es un libro positivo, optimista. Nos muestra que aún en las condiciones más adversas, cuando la especie humana se enfrenta a su extinción debido a un cataclismo o a una catástrofe mundial, merece la pena vivir. ¿Hay algo más optimista que eso? ¿Una oda a la vida más desgarradora y ferviente? No lo creo.

Sin duda se trata de otra joya de la literatura estadounidense que todo el mundo debería leer. Dejo unos fragmentos muy breves que subrayé:

“Ten presente que las cosas que te metes en la cabeza están ahí para siempre, dijo. Quizás deberías pensar en eso.

Algunas cosas las olvidas, ¿no?

Si. Olvidas lo que quieres recordar y recuerdas lo que quieres olvidar.”

“Desconfiaba de todo eso. Decía que los sueños correctos para un hombre en peligro eran sueños de peligro y que lo demás era solo la llamada de la languidez y de la muerte.”

“Sin listas de cosas que hacer. El día providencia de sí mismo. No hay después. El después es esto.”

3. Todo esto para qué


Desde que leí Tenemos que hablar de Kevin soy fan acérrima de Lionel Shriver. Todo esto para qué empieza muy bien, cómo no leer un libro con ese título. Me gustó mucho, entre otras cosas porque habla del dinero, los escritores rara vez hablan del dinero, que genera muchas más tensiones en la vida de las que quisiéramos admitir y define el rumbo de muchas historias. En Todo esto para qué Shep tiene 16 años y está sorprendido por lo barato que es todo en Kenia:

“Así pues, el valor de un dólar no era fijo, sino relativo. En New Hampshire se podía comprar una caja de clips; en el campo de Kenia, una bicicleta. De segunda mano, si, pero perfectamente aprovechable.

__Entonces ¿por qué no cogemos nuestros ahorros y nos venimos a vivir aquí?-había preguntado Shep mientras llevaban a cuestas la compra por el sendero de unas tierras de labranza.

En un raro momento de ternura, Gabe Knacker dio al muchacho una palmada en el hombro y, mirando a través de los verdeantes campos de café bañados por el luminoso sol ecuatorial dijo:

__A veces me lo pregunto.

Shep también se lo preguntaba, y había seguido preguntándoselo. Si en lugares como el África Oriental se podía al menos sobrevivir con menos de un dólar al día, ¿cómo de bien se podría vivir con más de veinte pavos?”

Desde entonces Shep intentará vivir en Kenia, pasará toda su vida envuelto en las redes del consumismo, será un esclavo del capitalismo, pasará años estando donde no quiere estar y acariciando el sueño de vivir en Kenia, sueño del que se burlan su esposa y sus amigos. La novela es una crítica al sueño americano, seria y desopilante a la vez, y en general al estilo de vida occidental, además está  escrita al estilo de Shriver, inteligente y ameno.

 4. Novelas en tres líneas


Desde antes de que existiera twitter ya había alguien adelantado a su tiempo que escribía sucesos en 140 caracteres: Félix Feneón, nacido en Turín en 1861. Félix es una de las personalidades más extrañas y asombrosas de la literatura europea del siglo XX, funcionario del Ministerio de  la Guerra y anarquista militante, sospechoso de un atentado contra un restaurante, coleccionista de arte y escritor. Novelas en tres líneas reúne los hechos que redactó para la página de sucesos de un diario francés. La editorial New York Review Books abrió una cuenta en twitter en la que publicaba regularmente sus nouvelles.

A mí lo que me enamora de Félix Feneón es su forma tan literaria de contar las cosas. Invirtiendo el orden de los hechos y centrándose en detalles que podrían parecer accesorios a los ojos de un ciudadano común logra darle un aura literaria a todos los sucesos crudos y ordinarios de la sociedad francesa de entonces, convierte los hechos en micro relatos sin mentir nunca, su mirada es una mirada genuinamente literaria. Lo considero una lectura obligada de todo el que guste del micro relato.


Aquí algunos:

Rompiendo la ventana del vagón, una piedra sacó un ojo a un pasajero en el tren Bayona-Toulouse. El tren se paró. No había nadie.

La enfermera Elise Bachmann, que ayer tenía su día libre, se manifestó loca en la calle.

Cierta loca en la calle se había hecho pasar abusivamente por la enfermera Elise Bachmann. Esta se encuentra en perfecto estado de salud.

Un sexagenario, el señor Bone, vecino de Andigné (Sarthe), en estado de mebriaguez, había pegado tan fuerte a su criada, que iba  ser procesado. Enojado, se ahorcó.

Lavilla, vecino de Fournier (Ardèche), se tumbó, se puso la boca de la escopeta bajo el mentón, y accionó el gatillo con un cordel. Muerto.

Un hombre de unos treinta años se ha suicidado en su habitación de un hotel de Mâcon. “No busquéis mi nombre”, dejó escrito.

Catherine Rosello, vecina de Tolón, madre de cinco hijos, quiso esquivar un trende mercancías. La atropelló un tren de pasajeros.

 Al resultar su devoción demasiado fogosa, el alcalde de Saint Gervais (Gironda) ha sido condenado. Se le suspende de sus funciones.

Apoyada en la barra de la ventana, G. Laniel, vecina de Meaux, de nueve años, se estaba poniendo los botines. Perdió el equilibrio y cayó a la calle.

Pensando que lo estaban dejando demasiado tiempo en el calabozo de Plouescat, el borracho Abgrall, natural de Guiclan (Finisterre), le prendió fuego.
  
“¡Te llevarás tu merecido!”, parece ser que le dijeron a Guyot de Toul en las elecciones. ¿Fue, pues, la política lo que lo ahogó en el canal?

La señora Jousseand, vecina de Chambon-Feugerolles, reconoció como asesino suyo al peón caminero Fayard, que la policía le presentaba.

A los borrachos ya ni siquiera les queda Dios:Kersilie, vecino de Saint-Germain, que creyó que la ventana era la puerta, ha resultado muerto.

Con un gancho una lavandera de Bougival sacó del agua un paquete: una niña recién nacida y viable que bajaba por el agua.

5. Rebelión de los oficios inútiles


Rebelión de los oficios inútiles, premio Clarín de novela 2014, me recuerda La casa del silencio de Pamuk, otro de los libros de mi altar personal, me lo recuerda porque también muestra la decadencia moral de una sociedad carcomida por la injusticia y la exclusión. La lectura le pone a uno la piel de gallina, la novela retrata a la perfección la cadena de desigualdades e infamias a la que parece estar condenada un gran parte de nuestra sociedad, el yugo de la avaricia y la mezquindad, el destino trágico e inexorable de generaciones enteras. Con un estilo ágil y descripciones precisas Daniel Ferreira aborda con éxito, -sin caer en obviedades ni clichés-, un tema difícil y exigente, y lo hace asumiendo las voces de tres personajes, una líder campesina, un terrateniente alcohólico y un periodista empeñado en contar la verdad. Las vidas de la campesina y del periodista se consumen en una lucha social sin fin, la del terrateniente en la decadencia y la desidia.

Un libro que recomiendo no sólo por su importancia desde el punto de vista histórico, pues aunque es ficción, la historia está enmarcada en un periodo de nuestra historia (los 70s) y no falla a la verdad en lo esencial, sino también por sus recursos y el efecto de su lectura.  

Comentarios

Entradas populares de este blog

#Teatro #Bogotá | La Casa Del Silencio en CASA TEA presenta: “EFÍMERO, escritura de un actor silente”

“EFÍMERO, escritura de un actor silente”: una reflexión profunda sobre el teatro físico. La Casa Del Silencio se presenta en CASA TEA este 25 y 26 de abril antes de emprender su gira internacional. Por: prensa, CASATEA BOLETÍN DE PRENSA "Después de cautivar al público en CASA TEA con sus últimas funciones este 25 y 26 de abril de “Efímero”, La Casa del Silencio se embarcará en una gira internacional. Con una técnica de mimo corporal dramático y una poderosa narrativa visual, esta obra reflexiva sobre la vida y el arte del actor silente promete dejar una huella imborrable en todos los que la presencien." La Casa del Silencio se embarcará nuevamente en una gira internacional, llevando su importante trabajo de teatro físico con funciones y seminarios a escenarios de Portugal (dónde La Casa Del Silencio tiene una presencia significativa ya que el teatro físico tiene un lugar muy importante en la escena Portuguesa), posteriormente irán a Valencia y Barcelona. Juan Carlos Agudelo P...

Buenos Aires en cinco poemas

Pablo Di Marco      Tantas veces me han pedido mi opinión sobre temas de los que no tengo la menor idea, tantas veces me han pedido que escriba artículos sobre cuestiones inverosímiles…  Hoy podré darle un respiro a mi inutilidad. ¿Por qué? Porque los amigos de Revista Corónica quieren saber cuáles son mis cinco poemas favoritos que giren en torno a Buenos Aires. No se me ocurre trabajo más sencillo y grato. Podría nombrar cincuenta. Buenos Aires transpira literatura. En cada esquina, farol y empedrado se esconde la huella de algún poema, cuento o novela. No nombraré a los mejores, nombraré a los más queridos, a esos que viajan siempre conmigo, esos que recito y tarareo sin siquiera pensarlo.   “Setenta balcones y ninguna flor” de Baldomero Fernández Moreno      Este poema eclipsó al resto de la obra de Baldomero Fernández. ¿Cuál es su secreto? Intuyo que una irresistible alquimia de encanto, inocencia y sencil...

Cinco poemas para un regreso

Por Carlos Alberto Castrillón* Me piden que escoja los cinco poemas de autores quindianos que más me gustan. De inmediato la mente se activa y permanece alerta por un buen rato. Regresan las viejas lecturas y los momentos gratos que la poesía favorece. La memoria se pone en “modo taxonómico”, pero al poco tiempo las jerarquías entran en crisis. Debo incluir un poema de El libro de los fantasmas, de Luis Vidales, poemario un tanto menospreciado ante el brillo de Suenan timbres; el poema ha estado marcado en ese libro desde hace 30 años. Es obligatorio agregar la poderosa «Canción del amor fugaz», de Carmelina Soto, que considero un ejemplo perfecto de su poética rebelde y autónoma. Un poema de Ricardo Cuéllar es indispensable para recordar una poesía densa y perdurable con la que conecté sin dificultades cuando la conocí tardíamente. Para el balance de tono, ya escogí uno de Omar García Ramírez, que ofrece el contraste perfecto, con la lucidez y el descreimiento que admiro en su poes...

CINCO POEMAS DEL MAGDALENA

Por: Angélica Hoyos Guzmán Es una tarea de canonistas escoger sólo cinco, sobre todo interpretando una definición de algo que aún se escapa de los más eruditos y sofisticados pensamientos ¿Qué es poesía? Me han pedido seleccionar cinco poemas del Magdalena colombiano y más allá de la filiación de esta tierra, me preocupa dejar por fuera algo o mucho dentro de mis preferencias. Por eso me remitiré al más común de todos los filtros, el de la publicación, o el más cercano que tengo, el de los libros que me han regalado y que son de poetas nacidos o adoptados por el Magdalena. Dejaré por fuera las fotos de Leo Matiz, aunque me parecen poesía pura; también se irá de este apartado “La piragua” que me lleva lugares de mi infancia y los más recónditos paisajes. Tendré que nombrar en lo que dejo a los decimeros del Departamento del Magdalena, quienes aún hoy cantan sus historias de la rivera. Es un acto de total injusticia escoger cinco poemas. Pero aquí voy a poner orden a mis afectos, ...

Cinco cuentos de Santander, por Daniel Ferreira

La gente quería un favor pero no lo pedía. No había fórmulas de deferencia, porque era una sociedad sin castas. No se usaba más que una forma del pronombre para el trato: usted. Lo cual creaba distancia en la conversación. Se llegó a confundir esa parquedad con agresión, hasta que se aceptó como una forma de la autonomía y acaso de la timidez, porque la mayoría sigue siendo una población de origen campesino y de autosuficientes madres solteras. No hubo esclavitud africana en ese territorio, pero sí alcabalas indígenas con impuestos infames. A las etnias rebeldes de origen Caribe que poblaron las riberas del río grande que llamaban Caripuaña o río de los muertos, se les persiguió y fueron diezmadas por los españoles con un arma bacteriológica: dejaban abandonados en medio de los pueblos indígenas a un enfermo con viruela. Pipatón lideró la resistencia indígena hasta que fue capturado y llevado al panóptico donde le dejarretaron los pies para impedir su fuga. El primer alzamiento cont...

Fernando Vallejo: A carcajadas contra el mundo

A carcajadas contra el mundo: Una conversación con Fernando Vallejo sobre el humor en la literatura. Por: Facultad de comunicaciones y filología de la Universidad de Antioquia . 2024. 

Teatro en #Bogotá | Teatro Estudio Alcaraván inicia actividades en su sede CASA TEA, 2025

La guerra no cesa y Teatro Estudio Alcaraván no deja que la esperanza del pueblo colombiano muera: “La Caída De Las Águilas” del 20 de febrero al 8 de marzo de jueves a sábado.  BOLETÍN DE PRENSA Por CasaTEA EL TEATRO LUCHANDO CONTRA EL OLVIDO Teatro Estudio Alcaraván inicia actividades en su sede CASA TEA con un homenaje muy especial que se hará en conmemoración de los 25 años de la tragedia del Salado (Carmen de Bolívar), con la temporada de su obra teatral “La Caída De Las Águilas” que se realizará del 20 de febrero al 8 de marzo, de jueves a sábado. Los integrantes del grupo Teatro Estudio Alcaraván sienten la necesidad de seguir en la lucha contra el olvido con la obra teatral “La Caída De Las Águilas”, una historia que a través del arte contribuye a la memoria histórica como acción restaurativa y emblemática de un país donde la guerra se permea las veces que sea “necesarias” a mano de los actores del conflicto armado. El teatro se erige como un lugar para reflexionar sobre lo...

Luz e hilo, por Han Kang

Han Kang, Corea del sur, 1970, a utora de "La clase de Griego".  Discurso del Premio Nobel de Literatura 2024. *Traducido por e. yaewon y Paige Aniyah Morris. [Circular de prensa, reproducción de la HJCK] El pasado enero, mientras ordenaba mi trastero antes de una mudanza inminente, me encontré con una vieja caja de zapatos. La abrí y encontré varios diarios que databan de mi infancia. Entre la pila de diarios había un panfleto, con las palabras “Un libro de poemas” escritas a lápiz en la portada. El cuadernillo era delgado: cinco hojas de papel A5 tosco dobladas por la mitad y encuadernadas con grapas. Había añadido dos líneas en zigzag debajo del título, una línea que ascendía en seis pasos desde la izquierda, la otra descendía en siete pasos hacia la derecha. ¿Era una especie de ilustración de portada? ¿O simplemente un garabato? El año –1979– y mi nombre estaban escritos en la parte posterior del libro, con un total de ocho poemas escritos en las hojas interiores por la m...

#Teatro #Bogotá #CASATEA | “OJOS DE PERRO AZUL”

Cortesía | Casa Tea Por:   Prensa CASA TEA   Bogotá 3 de noviembre, la magia y el realismo mágico de Gabriel García Márquez llegan al escenario de CASA TEA con 'Ojos de perro azul', una adaptación teatral del cuento icónico que cautivará al público capitalino este 8 y 9 de noviembre. Esta producción teatral, fruto del trabajo arduo de artistas quindianos, representa un evento significativo en la promoción del teatro regional y su circulación a nivel nacional. Al llevar esta obra a escena, el equipo busca no solo honrar el legado literario de García Márquez, sino también demostrar la riqueza cultural y artística del departamento del Quindío y llevarlo a muchos lugares a nivel nacional para brindarle el acceso a las artes a una amplia gama de espectadores, en un encuentro inolvidable entre la literatura y el teatro. Ojos de perro azul es uno de los cuentos más reconocidos del famoso escritor colombiano Gabriel García Márquez. Fue publicado por primera vez en 1972 como parte de s...

David Lynch, entrevista en ArtForum Magazine 2019

Entrevista a David Lynch en ArtForum Magazine . Tras el fallecimiento de David Lynch a los setenta y ocho años, Artforum vuelve a visitar nuestra entrevista en video de 2019 con el cineasta de vanguardia. En ella, Lynch habla de su primer amor, la pintura, y su posterior devoción a la creación artística, desde sus años de estudiante en la Academia de Bellas Artes de Pensilvania hasta su mudanza a Los Ángeles para dedicarse al cine o a las “pinturas en movimiento”.