Ir al contenido principal

Cantata en yo mayor, de Benhur Sánchez Suárez



El primero de mayo, a las cuatro de la tarde, en el auditorio Madre Josefa del Castillo, se presentarán algunas novedades editoriales de Caza de Libros y Pijao Editores, entre las que destaca el más reciente libro de Benhur Sánchez Suárez.


Por: Cecilia Caicedo Jurado de Cajigas.*

Me dio rabia descubrirme ignorante al saber que Swift se me había adelantado doscientos treinta años en ese descubrimiento” (p 57) En este tenor el escritor colombiano Sánchez Suárez relata su vida ciudadana y como creador de deliciosas piezas literarias. Primero está el nombre, después el oficio de redimir con la palabra creadora el curso de su vida, en adelante el lector se asoma a su periplo existencial, su ejercicio como maestro escolar hasta convertirse en el Maestro de arte y literatura, que todos conocemos. Ahí está encerrada su vida, que no hay que leerla como el texto biográfico sino como el retablo en el que está pintada la obra de un creador que usa la palabra como pincel y el pincel como palabra.
El arte de crear no podría explicarse oportunamente sino desde la simplicidad del relato que por su honestidad se torna vigoroso. Auténtico y sencillo sin petulancias ni pretensiones intolerables, Benhur va revelando el proceso de transcurrir en el tiempo pero sobre todo en el espacio. Y así desde el arte de narrar que maneja desde su primera novela publicada “La solterona” crea el tono en este texto que mandó imprimir sólo para que sus amigos conociésemos más al escritor que como en mi caso admiramos. La función de los que son “aparentes” pequeños relatos conlleva modos de entender la vida con sus recuerdos, valores, comportamientos, que en definitiva constituyen el lazo social que mueve los colectivos. Por eso solo son aparentes pequeños relatos porque por el contrario, como sugiere Lyotard, son mediadores del principio universal de la moral, en tanto entran en funcionamiento con las tradiciones, estilos de comportamiento, etc.[i]
De lo anterior se colige la formación de una geografía intelectual personal que  es otra manera de acercarse a Colombia, es otro camino de lectura, es la ruta que permite entender que en nuestro proceso cultural algunos nombres de valía deben ser leídos o releídos según el caso.
La cita con que abro este texto señala el camino interior del niño que creaba su propio mundo, los liliputienses azules que acompañan los primeros juegos intelectuales, sus amigos secretos, sus investigaciones tempranas. Crear escenarios y personajes sin saber que años antes lo había hecho Swift, para entender la vida de los pueblos pequeños, aldeas que no anulan la imaginación sino que por el contrario la catapultan para quienes tienen el don de la palabra y de la imaginación.
Es esta biografía de Benhur el acto más brioso que he leído en el género, porque además lleva implícito el sentido de búsqueda de lo colombiano, y de la generosa y honrada lectura con que Sánchez ve el mundo. Por esa misma generosidad su gestión cultural lo llevó a escribir su ensayo “Identidad cultural del Huila en su narrativa” para rescatar y visibilizar a las historias regionales. Con ese mismo sentido aboca la tarea de recuperar héroes olvidados en el recorrido nacional: “Buen viaje general”. Y entre estas obras nombradas   y otras redondea la veintena de libros publicados por Benhur, el huilense  nacido en Pitalito y cuya vida la vivió fundamentalmente en Bogotá y ahora radicado en Ibagué.
Una autobiografía bien contada significa ir tras los recuerdos, que a veces son imperdonables olvidos, pero a su turno expandirlos como con la linterna de Diógenes para asumir un país poco conocido por sus propios nacionales. De ello deviene no la lectura propia de una vida sino la del país que se sumergió de pronto en la extorsión, el de las llamadas y notas amenazantes y con ello la invocación desde los otros al miedo, a la obligatoriedad impuesta para cambiar el rumbo de las calles, a cambiar de recorridos, a sentir que sin saber por qué motivos el colombiano que ha hecho tránsito de la bonhomía del campo y la pequeña villa ahora en las modernidades manifiestas debe estar atento a la estulticia de los otros. Cambia el país, y el lector descubre en que consiste el cambio de escenario. El maestro de escuela juguetón e inquieto con una práctica educativa en el amor y no en la sanción, en la comprensión y el entusiasmo y no en la autoridad disciplinaria permite al lector comparar escenarios. Y no es que Benhur, el de la villa, se resista al cambio de la ciudad y los rigores de lo urbano contemporáneo, no su automirada, esto es su autocontemplación, es invocar la focalización de los escenarios por los que transitó Colombia y de una manera vertiginosa.
qué tontería me dirás. La verdad es que a veces vuelve esta fantasía de mi niñez a recorrer mi mente y por eso ahora te la cuento para que por lo menos, te quede una prueba mínima de mis amigos imaginarios o, mejor, de las alucinaciones de mi infancia.” (56)
Narrada en diálogo, hablando siempre con el lector, en tono personal para que sea íntimo, el tú que me señala y que deja de lado la primera persona  gramatical que pontifica. Con humor, siempre presente esa cualidad del hombre colombiano, con el guiño adecuado para la sonrisa cómplice. Buen amigo y buen escritor, para conducir el diálogo hacia los oficios sagrados de la escritura y la pintura, la buena música y mojar la cultura cotidiana de


[i] En  G Vattimo y otros. En torno a la posmodernidad. Anthropos, Barcelona 1994, p 37

*Docente universitaria, ensayista y novelista.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Buenos Aires en cinco poemas

Pablo Di Marco      Tantas veces me han pedido mi opinión sobre temas de los que no tengo la menor idea, tantas veces me han pedido que escriba artículos sobre cuestiones inverosímiles…  Hoy podré darle un respiro a mi inutilidad. ¿Por qué? Porque los amigos de Revista Corónica quieren saber cuáles son mis cinco poemas favoritos que giren en torno a Buenos Aires. No se me ocurre trabajo más sencillo y grato. Podría nombrar cincuenta. Buenos Aires transpira literatura. En cada esquina, farol y empedrado se esconde la huella de algún poema, cuento o novela. No nombraré a los mejores, nombraré a los más queridos, a esos que viajan siempre conmigo, esos que recito y tarareo sin siquiera pensarlo.   “Setenta balcones y ninguna flor” de Baldomero Fernández Moreno      Este poema eclipsó al resto de la obra de Baldomero Fernández. ¿Cuál es su secreto? Intuyo que una irresistible alquimia de encanto, inocencia y sencil...

Discurso de Annie Ernaux, Premio Nobel de Literatura 2022

Annie Ernaux, Premio Nobel, diciembre 2022 fuente: wmagazín Discurso de Annie Ernaux por el Premio Nobel de Literatura 2022. Traducción del francés de la revista mexicana Pijamasurf : ¿Por dónde empezar? Me he hecho esta pregunta decenas de veces delante de la página en blanco. Como si tuviera que encontrar la frase, la única, que me permitiera empezar a escribir el libro y barrer con mis dudas de golpe. Una especie de llave. Hoy, para afrontar una situación que, tras el estupor del acontecimiento –"¿de verdad me está pasando esto a mí?– mi imaginación me presenta con un miedo creciente, es la misma necesidad la que me abruma. Encontrar la frase que me dé la libertad y la firmeza para hablar sin temblar, en este lugar donde me han invitado esta noche. Esa frase, no necesito buscarla muy lejos. Surge. En toda su nitidez, su violencia. Lapidaria. Irrefragable. La escribí hace sesenta años en mi diario íntimo. "Escribiré para vengar mi raza". Se hacía eco del grito de Rimb...

Cinco poemas para un regreso

Por Carlos Alberto Castrillón* Me piden que escoja los cinco poemas de autores quindianos que más me gustan. De inmediato la mente se activa y permanece alerta por un buen rato. Regresan las viejas lecturas y los momentos gratos que la poesía favorece. La memoria se pone en “modo taxonómico”, pero al poco tiempo las jerarquías entran en crisis. Debo incluir un poema de El libro de los fantasmas, de Luis Vidales, poemario un tanto menospreciado ante el brillo de Suenan timbres; el poema ha estado marcado en ese libro desde hace 30 años. Es obligatorio agregar la poderosa «Canción del amor fugaz», de Carmelina Soto, que considero un ejemplo perfecto de su poética rebelde y autónoma. Un poema de Ricardo Cuéllar es indispensable para recordar una poesía densa y perdurable con la que conecté sin dificultades cuando la conocí tardíamente. Para el balance de tono, ya escogí uno de Omar García Ramírez, que ofrece el contraste perfecto, con la lucidez y el descreimiento que admiro en su poes...

Antología de la Poesía Colombiana de Harold Alvarado Tenorio

http://www.babab.com La editorial Agatha de Palma de Mallorca se atrevió a editar Ajuste de cuentas, una Antología crítica de la Poesía Colombiana , seleccionada y escoliada por Harold Alvarado Tenorio. Parte de las entradas que conforman esa antología se han ido integrando al cuerpo de la revista Arquitrave, que dirige y edita el poeta. Estas entradas pueden leerse en: http://www.antologiacriticadelapoesiacolombiana.com/ Además, ya antes un comentario a esos fragmentos ha aparecido en el Magazín del diario El Espectador , por Stanislaus Bhor. La noticia es que dicha antología viene acompañada por una portada con la imagen del poeta X504 y de un prólogo de Antonio Caballero , columnista de la revista Semana y autor de la novela de culto Sin Remedio, y el diario El Tiempo ha difundido el texto íntegro. Aquí fragmento de Un libro a cuchilladas : No voy a definir al odiado y odioso Harold Alvarado Tenorio en un par de adjetivos calificativos: quedaría faltando el poeta, capaz ...

Carta abierta a William Ospina, Por Fernando Cruz Kronfly

Carta abierta del novelista Fernando Cruz Kronfly al novelista William Ospina tras la columna publicada en el diario El Espectador ("De dos males"), en la que el ensayista manifiesta públicamente su voto a favor de la extrema derecha, entre las dos derechas que disputan la presidencia de Colombia. Aquí la columna de Ospina . Revista Corónica reproduce a continuación la carta abierta del escritor Fernando Cruz Kronfly :   "Cali, Junio 2, 2014  Querido William: Tú sabes la amistad y el afecto que nos une. Eso está claro y nada de esto se afectará. Pero, la publicidad de tu documento me obliga a hablarte en público. Entonces, debo decirte que tu decisión de preferir al Zorro sobre el Santo me ha llenado de estupor. No necesitabas explicarla de una manera tan aterradora. Lo de menos es tu voto anunciado, del que eres libre y soberano. Se trata de una decisión que, por supuesto, no comparto pero que respeto. Así es como suele decirse, con educación? Pero, lo que me ll...

Cinco narraciones de ciencia ficción colombiana

Juan Guillermo Caicedo Quintero El género de ciencia ficción en Colombia no es muy cultivado, aunque su evolución en las dos últimas décadas da un halo de optimismo frente a dicha forma narrativa. En esta recomendación de textos se busca resaltar a los dos padres del género en nuestro país (René Rebetez y Antonio Mora Vélez) y a  propuestas de nuevas generaciones, que por su calidad han ganado reconocimientos en premios internacionales. Del mismo modo, presentar estas historias como embajadoras de un género –casi de culto en Colombia– que busca nuevos lectores y presencia de la “periferia” en nuestros “centros” literarios. Empecemos a viajar en esta máquina del tiempo: Convulsión (1969) es un cuento del escritor René Rebetez tomado del libro Ellos lo llaman amanecer y otros relatos. El entorno de la historia es una sociedad en la que los jóvenes se han tomado el poder y recluyen a las personas que tienen treinta años o más en una suerte de campo de concentra...

El visitante, de Andrés Elías Flórez Brum

John Jairo Zuluaga* Andrés Elías Flórez Brum, El visitante, Bogotá, Caza de Libros-Pijao Editores, 2008. 76 P. Un lector silvestre que recorra las páginas de la novela corta: El visitante puede encontrarse con una historia del montón. Una de tantas, en las que se ven inmersas, a menudo, personas de cualquier pueblo del trópico colombiano. En cambio, un lector avisado encontrará en esa misma obra un refinamiento técnico que vale la pena mostrar. La obra sigue la tradición de novelas construidas con marco de composición, tal como lo evidencian Las mil y una noches , El Decamerón y, en el caso colombiano, La vorágine, de José Eustasio Rivera. El marco de composición: “Se construye a la manera de un formato previo e independiente, que antecede y da paso a la historia central, y luego lo cierra. Ese formato introductorio que luego cierra al final, se parece al marco de un cuadro de pintura, porque desde afuera rodea la historia central”. (Isaías Peña, E...

CUATRO POEMAS DE JOSEPH BRODSKY

Nota y traducciones de  Harold Alvarado Tenorio* La poesía de Joseph Brodsky [ Иóсиф Алекса́ндрович Брóдский ][1940-1996] se ocupa de asuntos metafísicos y religiosos sin desvincularlos de situaciones concretas en la vida y la historia individuales. Son en su mayoría poemas irónicos que miran los actos y el significado de ellos para desacralizar los gestos y pretensiones humanas. Es la vida individual, los problemas de cada uno lo que interesa a Brodsky , para con la poesía, crear nuevos comportamientos, nuevas éticas. Para Brodsky el lenguaje constituye la materia vital de la eternidad y la poesía, la más alta expresión de los lenguajes, un regalo de esos cosmos expresivos que hacen que el hombre traspase los tiempos a pesar de la muerte. La poesía, lo sabemos, no hace al hombre mejor o peor, pero sí más libre, y la libertad es el único instrumento contra los poderosos y sus cantos de sirena. El poeta es un instrumento del lenguaje, dijo al recibir el Nobel, un artesano d...

Erotismo, violencia y humor en los cuentos de David Betancourt

David  Betancourt (Foto de  Alan D Gómez) Óscar Castro García Con Buenos muchachos (2011), David Betancourt se presenta como cuentista, en una serie de historias deschavetadas, ingeniosas, reiterativas, de barrio, de calles, de canchas de fútbol, de adolescentes con familias disfuncionales, de muchachos que parecen buenos, que son buenos, que las mamás les creen cuando dicen, como lo hace irónicamente el hijo del cuento “Buenos muchachos”: Yo soy incapaz de hacer cosas malas, madre, y usted lo sabe. Cuál pistola, cuál vicio, cuáles amistades, cuáles robos, yo solo fumo cigarrillo y lo voy a dejar. Confíe en mí y ya, y no se ponga a escuchar pendejadas por ahí, cierre esos oídos de una vez. Yo no robo ni tengo amigos malos, solo salgo a chutar un balón y a charlar. Yo soy buena gente como hermano y no me meto con nadie, soy un pelao bien. Lo juro por Diosito lindo, madre (p. 95). En su primer libro de cuentos, sorprende desde la ironía del título c...

Breve historia de Editorial Sexto Piso

Irma Gallo, en la revista digital http://www.sinembargo.mx/ entrevista a la plana mayor de Editorial Sexto Piso. Fundada por un grupo de ex estudiAntes de la Unam, Sexto Piso es una de las editoras que puede darse el lujo de tener a Pirsig, Waburg, Orwell en un catálogo sin mancha. La asesoría de un grande de la edición, Roberto Calasso, la forma en que se elige un catálogo, las peripecias de las primeras apuestas literarias por autores mexicanos, en fin, un reportaje para conocer algunos misterios de cómo nace una editorial de culto, a quién se dirige y qué se ofrece a sus lectores. Un fragmento de la entrevista a Luis Ayala Blanco : No es fácil encontrar al escritor y editor Luis Alberto Ayala Blanco: no usa celular, no trabaja en un lugar fijo (además de su casa) ni tiene perfil en Facebook. Después de ser, durante cinco años, editor de La Gaceta en el Fondo de Cultura Económica, y de diseñar las aplicaciones para iPad de los poemas Blanco, de Octavio Paz y Muerte sin fin, ...