Caparrós ha vuelto a África, en busca del hambre; mejor: en busca de cartografiar el impacto del hambre sobre la vida y las sociedades humanas. En su blog, Pamplinas, ha puesto 5 entradas extraordinarias sobre los países en la lista de los más pobres que remiten a su mejor prosa (Una luna, Anagrama). Analítico, deductivo, clarividente, con una pregunta trivial extraída de las mil noches y una noche, que se le puede hacer lo mismo a un niño que a una reina de la belleza (¿qué le pedirías al genio de la botella?) logra urdir las ilusiones de los pueblos olvidados de todos los dioses (los de la economía mundial, por encima de todos): Creo que este proyecto empezó acá. Fue hace unos años, un día, en uno de estos pueblos, sentado con Aisha sobre una alfombra de mimbre delante de la puerta de su choza, cuando ella me contaba sobre la bola de harina de mijo que comía todos los días de su vida y yo le pregunté si realmente comía esa bola de mijo todos los días de su vida y tuvimos un ...