Ir al contenido principal

Carmelina Soto y la “literatura femenina”





Carolina Urbano*


Comienzo el año con varias lecturas sorprendentes: Bosquejos de infancia y adolescencia de Tomás de Quincey, la autobiografía del fotógrafo brasilero Sebastião Salgado y el libro de una poeta que desconocía por completo, la Poesía reunida de Carmelina Soto. Una publicación de la Universidad del Quindío que cuenta con una rigurosa investigación  a cargo de Carlos Alberto Castrillón, Yeni Zulema Millán y Luis Fernando Suárez, así como la recopilación de todos sus  textos en verso. Es una edición  muy cuidadosa que no escatima en detalles, por lo que ofrece al lector una mirada que va desde los datos biográficos, la recepción que tuvo la obra en su momento, tanto en  la sociedad como entre los poetas contemporáneos a Soto, hasta un análisis literario exhaustivo donde se muestra el valor de su propuesta literaria, teniendo en cuenta la “generación” a la que perteneció, al menos cronológicamente. Por la insistencia en lo último parece que el libro fuera, además de una manera de rendir homenaje y difundir la obra de Carmelina Soto, como corresponde a este tipo de publicaciones, una especie de “justicia poética”, de revancha contra el tiempo que ha sido olvidada o relegada de la historia oficial de la poesía colombiana.

A la poeta quindiana le pasa lo mismo que a Andrés Caicedo, pero sin la leyenda, unos la sobrevaloran y otros la borran. Hay muchas razones para que esto haya ocurrido, el libro trata de dar algunas aclaraciones o información sobre el asunto. Cada lector sacará sus propias conclusiones. La mía es la siguiente: Carmelina Soto era una poeta de provincia, lesbiana, tenía un carácter  fuerte y, valga la redundancia, era mujer. Como mujer libre dejó una propuesta poética mucho más atrevida que las que ofician el canon poético de la época: Maruja Vieira, Meira Delmar y Dora Castellanos. Afirmación que no es un despropósito porque ya se sabe de la brecha entre este grupo de poetas y sus contemporáneas latinoamericanas: Blanca Varela, Olga Orozco, por mencionar algunas. La pregunta de por qué en Colombia la poesía escrita por estas mujeres seguía rondando el siglo XIX, mientras las poetas latinoamericanas miraban otros horizontes quizás pueda responderse parcialmente con dos aspectos que atañen también a la persona y obra de Carmelina Soto: por el conservadurismo propio de la idiosincrasia colombiana y por una incipiente crítica literaria que permite fácilmente valorar lo personal por encima del valor estético, que es igual a decir que se juzga lo estético desde lo moral. Como sea es aberrante, mas no sorprendente en un país donde todavía hay poetas que se estremecen de horror cuando se les habla del Nadaísmo.

 No quiero sobrevalorar a Soto, pero sí confirmar que fue víctima de eso que llaman “literatura femenina”, pues su obra no se ajustaba a esa “clase” de literatura. Tal género no existe, aunque el término se haya usado, y se siga usando, para denominar una forma especial y exclusiva de las mujeres de hacer literatura. Esta se caracteriza por el uso de un lenguaje edulcorado, suave, con buena dosis de lirismo y temáticas, también privativas a la mujer, como el hogar, la maternidad, etc.


Carmelina lo sabía: “Yo no conozco poesía femenina, sino poesía simplemente”. Así lo expresó, lo luchó, en vano, y lo plasmó en sus escritos.

*Poeta y docente colombiana. Cursa estudios doctorales en Argentina.


Danza negra   

Arde la bailarina como la brasa pura 
 desde los pies desnudos hasta la cabellera. 
 En sus ojos acusa la fiebre de la fiera  
antes de ser abrazo... zarpazo... mordedura.  

Aquí la danza es negra como la selva oscura. 
 Jaurías de atabales la siguen por doquiera.
  Es ágil y pragmática, constrictora y rastrera, 
 antes de ser asalto felino... quemadura.  

Un cric cric de maderas abre surcos de tedio 
 mientras el son del gong cierra anillos de asedio
  que impúdicos asechan la carne tenebrida.  

Gira en un mismo punto, feral y tenebrosa, 
 selvática, liberta, telúrica, lustrosa,
  atenta sólo al rito violento de la vida. 
Carmelina Soto

Comentarios

Entradas populares de este blog

Buenos Aires en cinco poemas

Pablo Di Marco      Tantas veces me han pedido mi opinión sobre temas de los que no tengo la menor idea, tantas veces me han pedido que escriba artículos sobre cuestiones inverosímiles…  Hoy podré darle un respiro a mi inutilidad. ¿Por qué? Porque los amigos de Revista Corónica quieren saber cuáles son mis cinco poemas favoritos que giren en torno a Buenos Aires. No se me ocurre trabajo más sencillo y grato. Podría nombrar cincuenta. Buenos Aires transpira literatura. En cada esquina, farol y empedrado se esconde la huella de algún poema, cuento o novela. No nombraré a los mejores, nombraré a los más queridos, a esos que viajan siempre conmigo, esos que recito y tarareo sin siquiera pensarlo.   “Setenta balcones y ninguna flor” de Baldomero Fernández Moreno      Este poema eclipsó al resto de la obra de Baldomero Fernández. ¿Cuál es su secreto? Intuyo que una irresistible alquimia de encanto, inocencia y sencil...

CINCO POEMAS DEL MAGDALENA

Por: Angélica Hoyos Guzmán Es una tarea de canonistas escoger sólo cinco, sobre todo interpretando una definición de algo que aún se escapa de los más eruditos y sofisticados pensamientos ¿Qué es poesía? Me han pedido seleccionar cinco poemas del Magdalena colombiano y más allá de la filiación de esta tierra, me preocupa dejar por fuera algo o mucho dentro de mis preferencias. Por eso me remitiré al más común de todos los filtros, el de la publicación, o el más cercano que tengo, el de los libros que me han regalado y que son de poetas nacidos o adoptados por el Magdalena. Dejaré por fuera las fotos de Leo Matiz, aunque me parecen poesía pura; también se irá de este apartado “La piragua” que me lleva lugares de mi infancia y los más recónditos paisajes. Tendré que nombrar en lo que dejo a los decimeros del Departamento del Magdalena, quienes aún hoy cantan sus historias de la rivera. Es un acto de total injusticia escoger cinco poemas. Pero aquí voy a poner orden a mis afectos, ...

Cinco poemas para un regreso

Por Carlos Alberto Castrillón* Me piden que escoja los cinco poemas de autores quindianos que más me gustan. De inmediato la mente se activa y permanece alerta por un buen rato. Regresan las viejas lecturas y los momentos gratos que la poesía favorece. La memoria se pone en “modo taxonómico”, pero al poco tiempo las jerarquías entran en crisis. Debo incluir un poema de El libro de los fantasmas, de Luis Vidales, poemario un tanto menospreciado ante el brillo de Suenan timbres; el poema ha estado marcado en ese libro desde hace 30 años. Es obligatorio agregar la poderosa «Canción del amor fugaz», de Carmelina Soto, que considero un ejemplo perfecto de su poética rebelde y autónoma. Un poema de Ricardo Cuéllar es indispensable para recordar una poesía densa y perdurable con la que conecté sin dificultades cuando la conocí tardíamente. Para el balance de tono, ya escogí uno de Omar García Ramírez, que ofrece el contraste perfecto, con la lucidez y el descreimiento que admiro en su poes...

El visitante, de Andrés Elías Flórez Brum

John Jairo Zuluaga* Andrés Elías Flórez Brum, El visitante, Bogotá, Caza de Libros-Pijao Editores, 2008. 76 P. Un lector silvestre que recorra las páginas de la novela corta: El visitante puede encontrarse con una historia del montón. Una de tantas, en las que se ven inmersas, a menudo, personas de cualquier pueblo del trópico colombiano. En cambio, un lector avisado encontrará en esa misma obra un refinamiento técnico que vale la pena mostrar. La obra sigue la tradición de novelas construidas con marco de composición, tal como lo evidencian Las mil y una noches , El Decamerón y, en el caso colombiano, La vorágine, de José Eustasio Rivera. El marco de composición: “Se construye a la manera de un formato previo e independiente, que antecede y da paso a la historia central, y luego lo cierra. Ese formato introductorio que luego cierra al final, se parece al marco de un cuadro de pintura, porque desde afuera rodea la historia central”. (Isaías Peña, E...

Discurso de Annie Ernaux, Premio Nobel de Literatura 2022

Annie Ernaux, Premio Nobel, diciembre 2022 fuente: wmagazín Discurso de Annie Ernaux por el Premio Nobel de Literatura 2022. Traducción del francés de la revista mexicana Pijamasurf : ¿Por dónde empezar? Me he hecho esta pregunta decenas de veces delante de la página en blanco. Como si tuviera que encontrar la frase, la única, que me permitiera empezar a escribir el libro y barrer con mis dudas de golpe. Una especie de llave. Hoy, para afrontar una situación que, tras el estupor del acontecimiento –"¿de verdad me está pasando esto a mí?– mi imaginación me presenta con un miedo creciente, es la misma necesidad la que me abruma. Encontrar la frase que me dé la libertad y la firmeza para hablar sin temblar, en este lugar donde me han invitado esta noche. Esa frase, no necesito buscarla muy lejos. Surge. En toda su nitidez, su violencia. Lapidaria. Irrefragable. La escribí hace sesenta años en mi diario íntimo. "Escribiré para vengar mi raza". Se hacía eco del grito de Rimb...

Festival internacional de cine de Barichara: las buenas intenciones no bastan

Sin duda un festival de cine en Barichara es una magnífica idea, Barichara es un gran escenario y no todos los festivales tienen la fortuna de contar con un espacio como las antiguas bodegas de la Colombiana de Tabaco, sin embargo el festival es una oda a la mediocridad, es una lástima que las buenas intenciones de sus organizadores se queden sólo en publicidad. El evento es una farsa. Que pesar que teniendo tantos patrocinadores y el apoyo del Ministerio de Cultura y de la Gobernación sus organizadores no puedan hacer otra cosa que sepultar el festival, ¿no hay en Santander gente profesional que pueda organizar un evento de esta magnitud y no se quede sólo en publicidad y grandes ambiciones? Muy buena su intención de traer cultura a Barichara, pero subestiman al público de un modo vergonzoso. El público de Barichara es gente que ha tenido acceso a   la cultura y los que no lo han tenido no son tan ciegos para no notar las fallas. Pero para que no se crea que...

Cinco poemas en la niebla

Título: “Cristal herido” - Técnica: Óleo sobre madera Medidas: 60 x 70 cm. Autor: Manuel Aguirre M. Por: Carlos Castillo Quintero Crecían las palabras hasta la altura de mi corazón y reía sin olvidar la peligrosa edad de las manzanas. Carlos Martín L a literatura colombiana nació en Tunja , así lo afirmaba R.H. Moreno Durán (1945-2005). Incendiario y polémico, el novelista y ensayista tunjano, autor de la trilogía Fémina Suite aludía con esta afirmación a la obra de Sor Josefa del Castillo y al extenso poema Elegías de varones ilustres de Indias , escrito por don Juan de Castellanos, bitácora literaria de la colonización del Nuevo Mundo.             Ya en el siglo XIX se destaca la figura del chiquinquireño Julio Flórez, poeta popular cuya obra mantiene vigencia. Hacia 1939, Jorge Rojas, poeta nacido en Santa Rosa de Viterbo, funda el movimiento Piedra y Cielo , intento vanguardista de l...

Que hablen de ti, aunque sea mal

Carlos Castillo Quintero E l nombre de Oscar Wilde va unido al ruido y la figuración. Mordaz y extravagante, este escritor irlandés sigue vigente con libros como «El retrato de Dorian Gray», «Salomé», o «La importancia de llamarse Ernesto». Sin duda Wilde fue una de las mayores personalidades de su tiempo; celebrado como poeta y dramaturgo, deslumbró a los salones londinenses con su ingenio. Fue acusado de sodomía, enjuiciado, condenado, y recluido en la cárcel de Reading. Murió en 1900, en el exilio, arruinado material y espiritualmente. Hoy, de su extensa obra que incluye poemas, cuentos infantiles, obras de teatro, libros de ensayos, una novela, y cientos de epigramas, son estos últimos los más leídos gracias a la explosión de las redes sociales. Escribió Oscar Wilde: “Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no hablen de ti” , frase que han traducido los asesores de imagen simplemente como: Que hablen de ti, aunque sea mal . Esta recet...

Dos poemas de John Better

John Better Armella Barranquilla, 1978 Cronista, poeta y narrador. Sus textos han sido publicados en Soho, Arcadia, Cartel Urbano, El Heraldo, La Crónica del Quindío y Arquitrave, entre otros medios impresos. Autor de los libros Locas de la felicidad y  China White . A HOLIDAY Muchas cosas la están esperando aquí en New Orleáns Las bodegas repletas con whisky de contrabando Los niños negros de la iglesia protestante con sus tres platos de avena Los pasteles de manzana reposando en los alfeizares A todo esto Billie sonríe Y con su risa algo se quiebra Y la piedra que va dando tumbos en el fondo del río Canta Canta BASURA QUEMADA Basura quemada Eres basura quemada Joyas prestadas a una rubia tonta debutante del burlesque Basura quemada ardiendo en la aurora de un espejo quebrado De naipes coronados con amarillentos diamantes De condones usados y decapitadas cabezas de piñatas con los dientes quebrados Basu...

CONFERENCIAS: XIV Congreso Internacional El Cuerpo en el Siglo XXI

Carlos Rojas, crítico e investigador venezolano, invitado al XIV Congreso Internacional  El Cuerpo en el Siglo XXI. Aproximaciones Heterodoxas desde América Latina   Bogotá. -  El crítico e investigador venezolano Carlos Rojas será el primer representante de la Universidad Nacional Experimental de las Artes (UNEARTE), de Venezuela, en la nueva edición del XIV Congreso Internacional  El Cuerpo en el Siglo XXI. Aproximaciones Heterodoxas desde América Latina , que se celebrará los días 6, 7 y 8 de octubre de 2025 en la Facultad de Artes ASAB de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas (Bogotá, Colombia). El congreso cuenta con el respaldo de instituciones académicas de gran prestigio como la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (México), la Facultad de Estudios Superiores Iztacala (UNAM, México) y la Facultad de Estudios Superiores Acatlán (UNAM, México), además de un comité organizador comprometido con abrir nuevas miradas sobre el cuerpo, la esce...